La infinidad de opciones que presenta el sistema de franquicia permite cubrir las expectativas y ambiciones de todo tipo de emprendedores, desde aquéllos que buscan soluciones para convertirse en su propio jefe, hasta inversores con mayores ansias empresariales, que no sólo se conforman con un pequeño negocio y apuestan por el desarrollo de conceptos de multifranquicia (mediante la adquisición de varias unidades de una misma cadena) o plurifranquicia (varias unidades de distintas redes).
La franquicia está plenamente desarrollada en nuestro país y ha alcanzado un elevado grado de madurez en España y en todos los países de nuestro entorno, donde son muchos los emprendedores que se deciden por este sistema a la hora de poner en marcha un negocio. Pero, ¿a qué se debe esta confianza? Las ventajas que aporta frente a la alternativa de crear un negocio independiente son numerosas. Aquí destacamos algunas de ellas:
1. Modelo de Negocio Probado
Es fundamental. Las franquicias suelen ofrecer un modelo de negocio probado, exitoso y experimentado. Ya se ha demostrado que la fórmula de negocio funciona en otras ubicaciones y que el modelo de empresa es atractivo para los clientes, lo que reduce el riesgo de fracaso en comparación con comenzar un negocio desde cero.
2. Aprovechamiento de la imagen de marca
El franquiciado va a desarrollar su actividad bajo el resguardo de una marca que disfruta de una reputación creciente en el ámbito nacional, e incluso, internacional. Esto beneficia a que el negocio franquiciado interese y fidelice a nuevos clientes desde la inauguración, ya que están habituados al producto o el servicio que se les va a ofrecer.
3. Acceso al know-how
El saber hacer acumulado mediante la experiencia del franquiciador permitirá que cualquier inversor en franquicias sin experiencia previa en la actividad pueda acceder al negocio gracias a la formación técnica y comercial recibida por la central. Este saber hacer o Know-How acumulado a través de la experiencia del franquiciador habrá de ser secreto, original y sustancial. Tiene además que ser reproducible y fácilmente transmisible, lo que permitirá que cualquier interesado en la cadena sin experiencia previa en la actividad pueda acceder al negocio gracias a la formación técnica y comercial recibida por la central y a los manuales operativos que esta habrá de entregarle. En ellos quedan plasmadas toda clase de dudas o acciones más cotidianas en la gestión diaria del negocio.
Cuando un franquiciado ingresa en una red de franquicias accede a un profundo conocimiento del mercado al que se incorpora, de las demandas de su consumidor y de las técnicas que han hecho posible crecer a la red, una distancia muy importante comparada con la que obtiene aquel que inicia su negocio desde cero.
4. Disminución del riesgo empresarial
De la misma forma que aumenta el conocimiento del franquiciado, disminuye el riesgo empresarial al emprender en franquicia. El franquiciado será propietario de un negocio avalado por la experiencia del franquiciador, con satisfactorios resultados. Invertir en un negocio franquiciado es hacerlo en una fórmula comercial probada y consolidada, que en algunos casos cuenta con muchos años de experiencia en el mercado. Con ello se reduce enormemente el riesgo de iniciar una actividad comercial en solitario, si bien es necesario señalar que no se erradica del todo.
5. Ser dueño de un negocio propio
La franquicia constituye una vía de crecimiento habitual como solución del autoempleo. Al convertirse en inversor en franquicias, el apoyo y la experiencia de la central de franquicia atenuará las posibles carencias que pueda tener el franquiciado. Por otro lado, cuando una persona trabaja para sí misma, no hay duda de que sus esfuerzos tienen una recompensa mucho mayor y más rápida, principalmente en forma de ingresos. Está demostrado que un establecimiento funciona mucho mejor que otro gestionado por una persona contratada por cuenta ajena.
6. Asistencia permanente de una organización
Las cadenas de franquicias proporcionan formación y asistencia sobre todos los aspectos y peculiaridades del sistema de negocio, tales como técnicas de venta, localización del emplazamiento más adecuado, decoración del local, merchandising, contabilidad, informática…
De todo ello se aprovechará el futuro franquiciado antes de iniciar su negocio, de forma que llegado el momento, esté perfectamente capacitado para resolver cualquier cuestión relativa al mismo. Esta asistencia técnica y comercial, que proporciona la central durante las primeras semanas de apertura, se transforma después en un servicio permanente. Así, para que la gestión sea correcta, la central deberá mantener un seguimiento periódico del negocio, así como proporcionar los medios adecuados para que se haga un uso correcto de los recursos empleados. Además, a medida que se va desarrollando, la central de franquicia tiene la capacidad de implementar mejoras en el sistema que, posteriormente, serán útiles a su actividad.
7. Aprovechamiento de acciones publicitarias
Al mismo tiempo que las cadenas utilizan los esfuerzos de las centrales para implementar mejoras, también se aprovechan de las acciones de publicidad y marketing que desarrollan y que, de otro modo, seguramente no podrían estar al alcance de un negocio independiente.
Generalmente, es la propia central de franquicias la encargada de gestionar la comunicación y la publicidad de la marca, sirviéndose de los recursos que proporciona la red en concepto de fondo de marketing.
8. Continua actualización del modelo
Gestionar un pequeño negocio absorbe mucho tiempo, especialmente al inicio, y la mayoría de los pequeños empresarios están demasiado ocupados para pensar en el desarrollo de nuevos productos o servicios. Al emprender en franquicia, el franquiciador busca la manera de mejorar los beneficios de su red de franquicias, descargando al inversor en franquicia (el franquiciado) de esta labor.
9. Zonas de exclusividad
En la mayoría de contratos de franquicia aparece una cláusula de exclusividad que también supone una ventaja indiscutible para el franquiciado, por cuanto compromete al franquiciador a no instalar en un área previamente acordada ninguna otra unidad de su cadena, ya sea propia o asociada.
Y además,
- La mayoría de las franquicias ofrecen capacitación inicial y continua, así como soporte en áreas como marketing, operaciones y gestión. Esto puede ser invaluable, especialmente si eres nuevo en el sector.
- Casi todas las franquicias pueden aprovechar las economías de escala para obtener mejores precios en suministros, equipos y marketing. Esto supone costes operativos más bajos para los franquiciados.
- El franquiciado puede también beneficiarse del acceso a la tecnología y sistemas que a menudo proporcionan las centrales de franquicia y que mejoran la eficiencia y la gestión de sus negocios.
- Convertirse en franquiciado te conecta con una red de otros empresarios en la misma franquicia. Esto proporciona oportunidades de aprendizaje, intercambio de ideas y colaboración.
- Aunque eres el dueño de tu negocio, aún cuentas con el respaldo y el apoyo de la empresa matriz. Esto te brindará cierta independencia empresarial con un paraguas de seguridad.
- Tendrás un más fácil acceso a financiación. Muchas franquicias tienen acuerdos con bancos o instituciones financieras que facilitan el acceso a la financiación para sus franquiciados.
Es importante recordar que, si bien las franquicias ofrecen ventajas significativas, no siempre son adecuadas para todos. Es fundamental investigar a fondo y seleccionar una franquicia que se adapte a tus intereses, habilidades y recursos. Además, debes revisar cuidadosamente los términos del contrato de franquicia y todos los aspectos y detalles económicos tanto en lo referente a los detalles de inversión, fondo de maniobra y ingresos y gastos adaptados a tu realidad.
Tanto si deseas recibir asesoramiento personalizado para incorporarte en franquicia, como si eres empresario y quieres conocer las ventajas de desarrollarte en franquicia, puedes contactar directamente con nosotros a través del teléfono 911 592 558 o en el mail [email protected]